Un informe difundido ayer reveló que uno de cada cuatro argentinos se encuentra bajo el umbral de la pobreza. Según el documento, es un problema que se agravó en los últimos años y acusa que el Gobierno no ha publicado cifras desde 2013.
Los autores del estudio son un grupo de empleados del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), asociados en el sindicato ATE-INDEC, que fueron apartados de sus tareas durante la reforma del organismo que fulminó su credibilidad en 2007 y ahora protestan por lo que consideran una manipulación de los datos.
Según el sondeo, a finales de 2014 la pobreza en Argentina se situó en un 25,1%, lo que representa un ascenso de 4,4 puntos en comparación al cierre de 2013 y que equivale a 9,6 millones de personas.
En cuanto a la tasa de indigencia, se registró un 5,6%, lo que significa que más de 2,1 millones de personas no podrían acceder a la canasta básica.
El informe se suma a los de otras consultoras privadas que sitúan a hasta un 30% de los argentinos en situación de pobreza.
Los datos de ATE-INDEC fueron tajantemente rechazados ayer por el jefe de Gabinete del Gobierno, Aníbal Fernández, quien aseguró que los estudios privados "son una mentira", ya que ninguno cuenta con la metodología adecuada ni con los medios suficientes para dar números confiables.
"Lo que dicen es una mentira como tantos que revolean números para estar instalados en medio de la discusión. ¿Qué sentido tiene que discutamos esto? Es cero seriedad, cero importancia, y lo que hacen es ponerse por arriba un poquito como para dar la discusión", recalcó el jefe de ministros argentino.
Fernández recalcó que "el índice se está calculando" y que su metodología fue analizada "inclusive con el Fondo Monetario Internacional".
antecedentes
El problema de la medición de la pobreza en Argentina comenzó hace más de un año, cuando el INDEC dejó de difundir datos sobre la materia.
La última cifra oficial, que corresponde al primer semestre del año 2013, arrojó un 4,7% de pobreza en Argentina.
Según consigna EFE, las estadísticas se encontraban ya afectadas por la manipulación de otros indicadores, en especial el Índice de Precios al Consumo (IPC), cuya medición fue duramente criticada por organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), uno de quienes consideraban que el Gobierno maquillaba la elevada inflación.
Pese a las críticas recibidas, el Ejecutivo justificó el silencio oficial sobre la pobreza con el argumento de que la introducción de cambios metodológicos en el INDEC tras la asunción del actual ministro de Economía, Axel Kicillof, provocó un desfase entre los números que no permite dar cifras reales, ya que depende de la trayectoria del resto de indicadores.
El último en apuntar una cifra de pobreza desde el oficialismo fue el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, quien a finales de marzo presentó un estudio elaborado por el Congreso y otras instituciones, según el cual la tasa de pobreza en el país trasandino es del 14,9 %.
En declaraciones realizadas a la radio Metro el 26 de marzo pasado, el ministro Axel Kicillof entregó una curiosa explicación ante las acusaciones en contra del Gobierno por ocultar las cifras de pobreza en Argentina. "Cuántos pobres hay es una pregunta bastante complicada. Últimamente no tengo el número de pobres, me parece que es una medida un poco estigmatizante", sostuvo el titular de Economía, quien recibió fuertes críticas por estos dichos.