Falta de cuidado de plazoleta preocupa a los vecinos
chañaral. Algunos habitantes de la población Ampliación María Medalla están molestos con otros integrantes de la comunidad que no cuidarían el espacio público.
Molesta se encontraba una de las vecinas del sector de ampliación María Medalla al ver que hijos de vecinos del mismo sector no cuidan una plaza que lleva apenas meses de ser inaugurada.
A pesar de los diferentes letreros que se instalaron en las esquinas del área verde los habitantes del sector dicen que estos no son respetados por las personas adultas y niños, quienes los han estropeado, ya sea con bicicletas o tablas de skate.
"En el sector alto del castillo, instalado como juego, en una oportunidad se encontró una pareja manteniendo una relación íntima. Lo que se traduce en una preocupación y al mismo tiempo un llamado de atención para quienes vivimos en el sector. Ya que en algunas oportunidades hemos observado como juegan menores que no superan los seis años cerca de la media noche", señaló una de las vecinas que dio a conocer los hechos de los que han sido testigos. "Yo solo espero que nunca tengamos que lamentarnos de algo", agregó.
Otro de los vecinos del mismo sector señaló que según su percepción son los padres quienes debería preocuparse de lo que hagan sus hijos al interior de esta plaza con sus bicicletas y otros juegos. "Tengo que venir con mi hija para que le respeten su espacio y cuando uno les señala algo recibimos gratuitamente insultos, de eso deberían preocuparse y es tanta la impotencia que esta plazoleta, que costó tanto dinero, no podamos usarla por culpa de pocos que no les enseñan a sus hijos donde ellos deben jugar y los espacios que deben respetar", dijo el vecino.
Al intentar conversar con los jóvenes, se le señaló la prohibición del uso de la bicicleta al interior de la plaza y se les mostró los letreros. Los menores optaron por el silencio para luego simular que se retiraban del lugar.
Uno de ellos regresó en forma desafiante para mostrar sus habilidades en el manejo de este pequeño vehículo para luego alejarse al ver que sus compañeros no lo acompañaron en su accionar.
Al término algunos vecinos del sector quedaron en acuerdo de intentar de conversar con los padres aunque con remotas esperanza de poder lograr algo puntualizaron.