Dominga Suárez tiene abejas hace dos décadas en su parcela de Piedra Colgada, en un principio en estado silvestre, pero en la actualidad cuenta con 20 panales con los cuales produce 100 kilos de miel al año. Aunque en Atacama existen 15 apicultores y apicultoras, la mayoría solo tiene las abejas para facilitar la polinización de sus productos agrícolas y muy pocos producen miel para el consumo humano.
Dominga es una de ellas y está preocupada por las enfermedades que puedan afectar a sus panales, precisamente en el marco de la celebración del Día internacional de la miel, los apicultores de la provincia tuvieron una capacitación a cargo de la seremi de Agricultura, Indap y SAG.
El profesional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) Ronald Herrera, realizó su intervención aludiendo a las principales enfermedades que afectan a las abejas en el sector de Atacama, impartiendo políticas de prevención, tratamiento, características y pruebas de campo para detectar su presencia.
Septicemia
En relación a la capacitación Dominga Suárez señaló que 'a nosotros los apicultores que tenemos abejas también se nos están muriendo y nos preocupa no sabíamos porque el SAG hizo un análisis y dijo que era septicemia y hay que averiguar sus causas, ahora las enfermedades se están viniendo más que antes'.
Asimismo Edelmira Obreque tiene sus abejas en estado silvestre, hubo un tiempo cuando tenía 18 panales, ahora solo le quedan cinco. 'Tengo abejas para poder producir vegetales, mi actividad ha mermado mucho y como apicultora me preocupa mucho, yo no quiero quedarme sin abejas, por eso estoy encargando nuevas reinas', afirmó Obreque.
De acuerdo con su testimonio Edelmira se dedica a esta actividad desde el 2007 y percibe que la disminución en sus poblaciones comenzó hace tres años. 'No les puedo decir que se murieron es como que se desaparecen, pero si se fueran estarían en los árboles y no lo están', agregó.
Producción
La producción de Dominga es a nivel familiar, con 100 kilos al año ya no da abasto para sus clientes y espera aumentar este año a 40 panales para aumentar su producción, uno de los factores que la hace atractiva es que donde ella vive ningún agricultor utiliza pesticidas.
'Yo tengo mi clientela y a mí me falta miel porque me la compra en los servicios incluso aquí me compraban miel y este año me falto, es muy buena 100 por ciento natural, en mi casa tengo eucaliptus y almendras y entonces a ellas no le falta la flor en todo el año y en primavera tienen la flor de chañar de la alfalfa', señala la agricultora.
Las abejas de Dominga tenían sus panales en el cerro, pero Indap tuvo que sacrificarlas porque fueron afectadas por la enfermedad del Loque americana que afecta a las larvas, 'yo no quería porque estaba encariñada con ellas pero tuvieron que sacrificarlas igual, ahí nos dimos cuenta de lo necesarias que son, porque cuando me faltaron bajaron mis cultivos, por eso yo las cuido con un doble propósito', señaló Suárez.